Al conocer a Claudia rápidamente captamos su energía: amante de la vida, buscando crecer con cada experiencia, enfrentando sin miedo los nuevos retos. Su madre nos contactó para hacerle un book como regalo especial de graduación. Fueron dos sesiones fotográficas donde disfrutamos de su vitalidad y sus ocurrencias.
Hay quienes gozan frente a una cámara; para otros es un poco más difícil y no les sale tan natural. Como fotógrafos intentamos no sólo componer la imagen y darle click a la cámara sino conocer a las personas que vamos a retratar. Si eres de esas que ama una cámara o por el contrario alguien que dice odiar estar enfrente de ella, estamos seguros que te podremos ayudar para hacer de tu sesión una experiencia gratamente inolvidable.